Kevin Bacon y Kyra Sedwick: 35 años de casados y cómo se reinventaron luego de ser víctimas de famoso estafador
El actor Kevin Bacon se convirtió en un ícono generacional de los años 80′ gracias a la película “Footloose”, apareciendo en los años siguientes en dramas, thrillers y comedias, demostrando que era un actor versátil.
Kyra Sedgwick, su compañera de vida y de arte, también hizo lo propio. Se conocieron en 1987, tras trabajar juntos en la película “Lemon Sky” y desde entonces no se separaron más. Se casaron en septiembre de 1988, y ya llevan más de 35 años juntos.
La pareja, que tuvo dos hijos casi inmediatamente después de casarse, Travis (hoy de 34 años) y Sosie (de 31), sin embargo tuvo que soportar una dura prueba. Después de muchos años de trabajar muy duro y ahorrar una millonaria suma de dinero, confiaron su dinero a Bernard Madoff, un asesor de inversiones que en su momento era considerado el gurú más buscado por quienes querían invertir con seguridad.
Kevin Bacon y Kyra Sedgwick, tras años de trabajo incansable, entonces, decidieron confiarle a este personaje su patrimonio con el que pensaban asegurar el futuro de su familia, pero no sabían que detrás del prestigio de Bernard Madoff se escondía el fraude más escandaloso del siglo. En 2022, la pareja reveló que había perdido casi toda la fortuna que habían acumulado durante sus años de trabajo debido a una estafa piramidal que afectó a miles de personas.
Años de rodajes, premios, sacrificios y ahorros se convirtieron en humo, pero eso no quebró ni desanimó a la pareja. Todo lo contrario. Kevin Bacon le dijo a su esposa: “No perdimos a nuestros hijos. No perdimos nuestra casa. No perdimos el amor. Bueno, lo que nos pasó apesta, así que arremanguémonos y pongámonos a trabajar. Hemos llegado hasta aquí, nuestros hijos están sanos, estamos sanos… Vamos a observar qué es lo que tenemos de bueno. Todavía podemos trabajar los dos. Creo que a la gente no le haría muy feliz escucharnos lloriquear por dinero”.
La pareja se enfocó entonces en su familia y conservar lo que aún tenían. Se fueron a vivir a su finca en Connecticut, no para escapar sino como una forma de renacimiento. Allí, entre árboles y animales, aprendieron a vivir sencillamente. Cuando no están filmando, Kevin alimenta gallinas, toca la guitarra y cultiva la tierra, mientras Kyra escribe, cocina y dirige. Hoy, ambos viven con los pies sobre la tierra y agradecidos del amor que todavía sienten el uno por el otro.
Consultados cómo han mantenido 35 años de matrimonio, Kyra ha dicho que una de las claves reside en el humor de su marido, mientras que Kevin Bacon, en tono de broma, ha dicho que el secreto es “conseguir que la temperatura del auto sea correcta para que ambos estemos felices”, agregando más seriamente que “para mí, cosas sencillas como caminar juntos por la calle o simplemente filmar en medio de la noche, todavía me producen felicidad”.
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