Ilustración de Jonathan Wolstenholme
Julio César Londoño
CONSEJOS PARA ESCRIBIR MUY MAL
La literatura es un ejercicio de pulso y equilibrio. Es inconveniente ser muy claro porque el texto termina encallando en obviedades, o muy críptico, porque nos pueden asestar una dura sentencia: «Hay escritores que parecen oscuros por su profundidad. Otros quieren parecer profundos a fuerza de oscuridad».