Mostrando entradas con la etiqueta Casa de citas / Vila-Matas. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Casa de citas / Vila-Matas. Mostrar todas las entradas

jueves, 24 de agosto de 2023

Casa de citas / Enrique Vila-Matas / Fleur Jaeggy y la frialdad



Fleur Jaeggy


Enrique Vila-Matas
FLEUR JAEGGY Y LA FRIALDAD
Fleur Jaeggy va siempre a lo esencial y, como si tuviera bien aprendida la involuntaria lección de Kafka, consigue muchas veces en una sola página, y a veces en una sola línea, que se haga visible de golpe, a modo de repentina revelación, la estructura desnuda de la verdad. Ese pavoroso desvelamiento siempre llega acompañado de la inevitable crueldad, jamás desligada de la rutinaria, aunque secreta, vida de la verdad. Tal vez por eso se dice a veces de esta escritora que es tan peligrosa. Pero es que su arte, al dejar sólo en pie lo esencial, no tiene a veces salida más natural que la inteligencia y la crueldad. La frialdad la añade la propia Jaeggy, y acaso sea éste el rasgo suplementario más destacado de su estilo; un rasgo que acude siempre sigiloso a su cita con las frases simples –algunas terriblemente sencillas- y que, en el fondo, es también su trazo más divertido.

Enrique Vila-Matas



viernes, 16 de julio de 2021

Casa de citas / Enrique Vila-Matas / Bolaño

Roberto Bolaño


Enrique Vila-Matas
BOLAÑO
Un 15 de julio de hace 18 años, moría Roberto Bolaño.
Ahora no creo engañarme si digo que, aquel día en el Novo, lo que no tardé nada en ver o en reconocer en Bolaño fue a un ermitaño lunático o mejor dicho, a “un escritor de antes”, esa clase de personajes que consideraba ya inencontrables porque creía que pertenecían a un mundo que había entrevisto en mi juventud pero que se había perdido ya para siempre; ese tipo de escritores que jamás olvida que la literatura, por encima de todo, es un ejercicio peligroso; alguien que no solo es valiente y no pacta ni un ápice con la vulgaridad reinante, sino que muestra una contundente autenticidad y que une vida y literatura con una naturalidad absoluta; un increíble superviviente de una especie en extinción...



martes, 7 de febrero de 2017

Casa de citas / Vila-Matas / ¡Velázquez!


Retrato de Mariana de Austria, reina de España
Velázquez

Enrique Vila-Matas

¡Velázquez!

Contaba Magris en su ensayo que en la sala del monasterio había escasos visitantes, pero entre ellos estaba la pareja formada por un padre y un hijo; el primero (de unos setenta y cinco años, poca estatura y aire tranquilo) llevaba de la mano al segundo, evidentemente afectado por el síndrome de Down. Los dos iban parándose delante de cada cuadro y el padre le explicaba al hijo, llevándole todo el tiempo de la mano. El hijo le escuchaba, asentía con la cabeza, murmuraba algo de vez en cuando; puede que tuviera cuarenta o cincuenta años pero tenía, sobre todo, decía Magris, “la edad indefinible de un niño marchito”.
El padre le hablaba, le escuchaba, le contestaba; probablemente llevara haciendo esto toda una vida y no parecía ni cansado ni angustiado, sino complacido por enseñarle a su hijo a amar a los Maestros. Cuando llegó al Retrato de Mariana de Austria, reina de España, se agachó para leer el nombre del autor, después se levantó de golpe y, dirigiéndose al hijo con un tono de voz un poco alto, le dijo:
—¡Velázquez!.