Bohumil Hrabal
VISIONES
… Mis abuelos y bisabuelos, a quien también les gustaba empinar el codo, a veces tenían visiones, se les aparecían seres salidos de los cuentos de hadas: mi abuelo vagabundo tropezaba con ninfas de agua, su padre, en el patio de la cervecería de Litovel, veía duendes y genios y hadas; en cambio yo, que soy culto a pesar de mí mismo, echado en la cama debajo del baldaquín de dos toneladas, veo Schelling y Hegel nacidos el mismo día y el mismo año; un día, vino cabalgando hasta mi cama Erasmo de Rotterdman en persona para preguntarme cómo se llegaba al mar.
Título original: Prílis hluoná samota
Una soledad demasiado ruidosa
Buenos Aires, Ediciones Destino, 1990.
Páginas 58, 59.
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