EL IMPERDIBLE
Walter Hunt fue un prolífico inventor estadounidense, nacido en 1796. A lo largo de su vida, patentó diversas invenciones notables, incluyendo un precursor de la máquina de coser y, por supuesto, el imperdible.
Se dice que Hunt inventó el imperdible en 1849. La anécdota cuenta que lo hizo para saldar una deuda de 15 dólares que tenía con un amigo. Mientras jugaba con un alambre de latón de ocho pulgadas de largo, se le ocurrió la idea de un alfiler con un mecanismo de seguridad para que la punta quedara oculta y no pinchara.
Obtuvo la patente estadounidense número 6,281 el 10 de abril de 1849. Poco después, vendió la patente a W.R. Grace and Company por 400 dólares (que equivaldrían a unos 15.000 dólares en 2024). Con ese dinero, pagó su deuda de 15 dólares y se quedó con el resto.
Fue un Invento Simple pero Revolucionario: A pesar de su aparente simplicidad, el imperdible fue una solución ingeniosa y práctica. Antes de su invención, los alfileres comunes eran peligrosos y podían soltarse fácilmente, causando pinchazos. El diseño de Hunt, con su cierre de seguridad, resolvió este problema de manera efectiva.
Aunque existían objetos similares en la antigüedad (como las fíbulae, que eran broches decorativos con un principio similar), el imperdible moderno, con su diseño funcional y de seguridad, es atribuido a Walter Hunt. Su invención, surgida de una necesidad cotidiana, se ha convertido en un objeto indispensable en la vida diaria de millones de personas.
Hay cosas que por hoy siguen vigentes, a pesar del avance tecnológico.
No hay comentarios:
Publicar un comentario