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sábado, 26 de marzo de 2022

Casa de citas / Anna Starobinets / Una edad difícil


Anna Starobinets


Anna Starobinets

«Una edad difícil»



“No fue hasta al cabo de unos años que Marina se dio cuenta de que aquel día, un tórrido domingo de agosto en el que brillaba un sol implacable, fue el único día bueno de sus vidas. No feliz, sino simplemente bueno”.



“Ayer tuve mis primeros hijos. Me comí a tres. Necesitaba fuerzas”.


Anna Starobinets


“Como si la víspera hubiera devorado unos veinte caracoles y en aquel momento estuvieran muriéndose poco a poco en su estómago, retorciéndose en su última agonía”.


Anna Starobinets

“Y fuera lo que fuera lo que hubiera pasado al comienzo, eran muchas las cosas que los habían ido uniendo después, los años que habían vivido juntos, las cosas que habían comprado juntos, las peleas en las que se habían exprimido y chupado hasta la última gota, día y noche, como vampiros desquiciados, el tedio mutuo, la rabia mutua y muchas otras cosas”.

Anna Starobinets
Una edad difícil
Traducción de Raquel Marqués García
Prólogo de Ismael Martínez Biurrun
Nevsky Prospects (Madrid, 2012)








Casa de citas / Anna Starobinets / El escarabajo

 


Anna Starobinets
EL ESCARABAJO


Absorta, la niña hurga algo que está en la mesa con un trozo de cristal verde. A su derecha hay un tarro sucio de mayonesa, por cuyo fondo se arrastran lombrices de tierra, escarabajos de color naranja y negro, y un enorme sanjuanero.

Saca un escarabajo del tarro y lo pone panza arriba encima de la mesa. Tiene las manos sucias y regordetas, y mugre por debajo de las uñas. Sacando la lengua fruto de la tensión, corta el insecto en dos a lo largo de la panza con el cristal.

—Pero ¿no ves qué has hecho? —le digo—. Has matado al escarabajo. Su mamá va a ponerse muy triste.

Me quito las gafas oscuras y la miro a los ojos. Con tristeza y un poco de reproche. Por fin, su rostro se arruga en un puchero. Las lágrimas gotean en la mesa. Frunce los ojos.

—¿Sabes qué puedes hacer para que su mamá te perdone? —le digo.

—¿Qué?

—Tragarte el cristal.

Anna Starobinets
Una edad difícil