Y, sin embargo, es una verdad universalmente reconocida que las mujeres escriben y compran la mayoría de la ficción . En 1996 se creó el premio Women's (inicialmente conocido como Orange) después de que no hubiera ninguna autora preseleccionada en 1991, y solo una durante los cuatro años siguientes. Como señaló su fundadora y directora Kate Mosse, el problema no era simplemente la ausencia de mujeres, sino que nadie parecía notarlo . "Es hora de las Paulettes y Paulinas", bromeó la novelista Sara Collins, una de las jurados del Booker de este año, refiriéndose a los tres Pauls -Paul Murray, Paul Harding y el ganador, Paul Lynch- en la lista de preseleccionados del año pasado, dominada por hombres.
El jurado de 2024 se quedó “sorprendido y emocionado” al descubrir que cinco de sus elecciones eran de mujeres, porque el género no era el factor más significativo en las historias que tenían que contar. El mensaje era que esta es una lista basada en la excelencia literaria, no en el cumplimiento de requisitos.
No hay límite para el alcance de estas novelas, que van desde el espacio exterior en Orbital de Samantha Harvey (la única autora británica en la lista) hasta las cuevas subterráneas prehistóricas en la cerebral aventura de espionaje de la autora estadounidense Rachel Kushner, Creation Lake . La emergencia climática, el legado de la guerra, el trauma y el duelo son algunos de los temas abordados en una lista corta que incluye la desafiante Held de la poeta y autora canadiense Anne Michaels (famosa por Fugitive Pieces), la historia de amor gay convertida en thriller The Safekeep de la novelista debutante holandesa Yael van der Wouden, y Stone Yard Devotional de la australiana Charlotte Wood, sobre un ambientalista de mediana edad que se retira a un convento.
Se trata de novelas urgentes y abiertas que se enfrentan a las preguntas más importantes: ¿de dónde venimos y hacia dónde vamos? Lo mismo se puede decir del único hombre de la lista. James, una versión de Huckleberry Finn desde la perspectiva del esclavo fugitivo Jim, del aclamado escritor estadounidense Percival Everett , ha sido elogiada por los críticos y se la ha considerado durante mucho tiempo como la favorita para el premio.
Aunque el número de finalistas femeninas es motivo de celebración, no nos dice nada nuevo. Las novelistas han dominado las páginas de libros, los grupos de lectura y las listas de premios en general durante varios años. ¿Por qué tardó tanto el Booker? De hecho, la mayor tendencia editorial reciente es muy femenina: el fenómeno Sally Rooney y la consiguiente avalancha de libros sobre las vidas y los amores de mujeres jóvenes .
Para sorpresa de algunos, la cuarta novela de Rooney, Intermezzo , que se publicará la semana que viene, ni siquiera estaba en la lista de finalistas del Booker. Pero los premios y sus listas de finalistas reflejan los gustos de sus jueces, y en una industria a menudo acusada de una obsesión con la juventud y la novedad, una de las muchas cosas alegres de esta selección es que muestra a escritoras de entre 40 y 50 años, y de entre 60 y 70 años, así como a Van der Wouden, la más joven a sus 37 años, y coloca sus libros junto a James, el que definió su carrera, de Everett. Juntas, estas notables novelas conforman la lista de finalistas del Booker más sólida en mucho tiempo.
THE GUARDIAN
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