Triunfo Arciniegas
24 de octubre de 2016
El lejano reino de las vírgenes
En la época de mi madre la mujer era de un solo hombre. Quiero decir, se casaban vírgenes y para siempre, y no buscaban reemplazo cuando enviudaban. Ya no es así. Las adolescentes de ahora no tienen novio sino amante y en la relación no existe el matrimonio como destino. Se entiende que hay que vivir primero, hay que experimentar. No digo que lo uno sea mejor que lo otro, digo que las cosas han cambiado. Las mujeres siguen casándose de blanco pero el color ya no significa pureza o virginidad.
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