Tras amputarse dedos y extirparse las orejas, Black Alien abandona su modificación corporal
Su plan era cortarse una pierna pero el francés Anthony Loffredo anuncia que deja su proyecto de transformarse totalmente
Este tipo de intervenciones se denominan modificaciones corporales extremas: intervenciones voluntarias, poco convencionales, y con escasa aceptación social. A menudo requieren procedimientos quirúrgicos especializados y pueden ser irreversibles. Lo que las distingue de otras modificaciones menos radicales, como los piercings comunes o los tatuajes, es su radicalidad: escarificaciones, implantes subdérmicos, amputaciones o tatuajes oculares. La percepción social de estas prácticas varía considerablemente entre culturas. Con sus 1,4 millones de seguidores, Loffredo se ha establecido como uno de los iconos más reconocidos en el ámbito mundial de la modificación corporal extrema. Se considera un artista, y su propio cuerpo es el medio a través del cual expresa su arte. Ha descrito su proyecto de transformación corporal como una “evolución artística sin límites”, en la que él mismo es tanto el creador como la obra.
La historia de The Black Alien ha generado una notable conmoción social tanto por su apariencia transformada como por su decisión de detener el proceso antes de completarlo, es decir, antes de alcanzar el 100% de su metamorfosis. Los numerosos comentarios en redes sociales, a menudo insensibles, reflejan este juicio, pasando por alto que la próxima operación que Loffredo tenía planeada era la amputación de su pierna para reemplazarla con una prótesis biomecánica. El creador de contenido Rene ZZ, con más de un millón y medio de suscriptores en su canal, criticó en un streaming la falta de constancia de Loffredo: “Lo deja todo. Hasta el punto de que su único proyecto constante, destrozarse la vida para parecer un alien, también lo deja”. En otros comentarios, más positivos, se destacaba un aspecto clave: si Loffredo había priorizado la transformación ante todo, no hay cambio más significativo que el de modificar la propia opinión y orientarse hacia nuevos rumbos.
Antes de iniciar su proyecto, Loffredo era un joven con una apariencia convencional y trabajaba como encargado de seguridad en una discoteca. Comenzó su transformación a los 26 años. En sus entrevistas, nunca ha mencionado una epifanía o un evento específico que lo impulsara a emprender este camino, que tendría consecuencias tan profundas en su vida. La primera intervención que Loffredo realizó sobre su cuerpo fue hacerse una lengua bífida, es decir, bifurcada, similar a la de ciertos reptiles como las serpientes. Esta alteración es una de las más arraigadas en el ámbito de las modificaciones extremas. Para Loffredo, este acto, seguido de intervenciones más drásticas como la amputación de nariz, orejas y dedos, no constituye “una mutilación”, sino “una evolución personal y una mejora estética”. En una entrevista de 2021 con El Periódico, The Black Alien explicó que estas transformaciones le hacen sentir “mejor consigo mismo y con su cuerpo”.
En 2012, la película American Mary retrató el mundo clandestino de las modificaciones corporales. Estas operaciones son ilegales en la mayoría de los países. Loffredo viaja por el mundo en busca de profesionales que le ofrezcan servicios de modificación corporal. Antes de anunciar la finalización de su proyecto, había publicado un post en el que solicitaba un nuevo especialista, ya que había cesado su colaboración con Gatto Moreno, un modificador mexicano con quien trabajaba hasta ese momento. Por otro lado, el británico Brendan Doctor Evil McCarthy fue condenado por realizar modificaciones corporales extremas sin anestesia, como la eliminación de orejas y un pezón, y la bifurcación de lenguas. Tras una batalla legal de dos años en el Reino Unido, el Tribunal de Apelación dictaminó que el consentimiento de sus clientes no era una defensa válida, dando como resultado una condena de 40 meses de prisión. Fue uno de los primeros casos en el país que abordó directamente la legalidad de las modificaciones corporales extremas fuera del ámbito médico profesional. Su condena estableció un precedente legal importante.
En el documental I Transformed Myself Into An Alien (2023, Arthur Bruel), se examina la discriminación cotidiana que Loffredo sufre debido a su apariencia única. El joven francés relata las dificultades que encuentra en actividades diarias, como sentarse a tomar algo en una terraza o buscar empleo. “Quiero pedir un Uber y el Uber no para, se va. En el restaurante no puedo entrar”, contaba. También ha tenido problemas para verificar su identidad en la cuenta de Onlyfans que recientemente ha creado, debido a que la aplicación era incapaz de reconocer su rostro. “Es una lucha cada día, porque cada día encuentras gente nueva que no entiende, que quiere juzgar. Así es la vida, no todos entienden todo. Al igual que yo no entiendo muchas cosas sobre mucha gente”, relató en el podcast Club 113 el año pasado.
El Libro Guinness de los Récords ha registrado diversos récords de modificaciones corporales que abarcan a personas de distintas culturas y orígenes. En Occidente, la modificación consciente del cuerpo con variados adornos simboliza, por un lado, la integración en una subcultura y, por otro, una diferenciación que puede llevar a la exclusión social. Un caso emblemático es el de Tom Leppard, conocido como El hombre leopardo, que falleció en 2016. Leppard dedicó gran parte de su vida a transformar su apariencia para parecerse a un leopardo, tatuándose cerca del 90% de su cuerpo con las características manchas de este felino. Su compromiso con esta identidad fue tal que vivió apartado de la civilización en una casa que él mismo construyó que asemejaba la guarida de un leopardo.
Muchos individuos con modificaciones corporales extremas han vivido percibiéndose a sí mismos, y por el resto de la sociedad como freaks o gente peculiar que vive de su cuerpo grotescamente alterado, evocando los freak shows y circos de fenómenos de finales del siglo XIX. Eric Sprague, conocido como El hombre lagarto o Lizard Man, ha participado en varios roles menores en el cine y se autodefine como un “freak profesional”. Su fascinación por los lagartos lo impulsó a invertir tiempo y dinero en su transformación, tatuándose el cuerpo con escamas, bifurcando su lengua y afilando sus dientes superiores para emular a estas criaturas.
The Black Alien ha mencionado en varias ocasiones que su sustento proviene de trabajar como modelo fotográfico, grabar vídeos y colaborar con distintas marcas. Su caso es similar al de Rick Genest, más conocido como The Zombie Boy, quien se destacó por sus tatuajes extremos y su presencia en los medios. Diagnosticado con un tumor cerebral a los 15 años, Genest experimentó un cambio radical en su vida que lo llevó a explorar profundamente los tatuajes y las modificaciones corporales. Su apariencia única lo llevó a establecer dos récords mundiales Guinness y a trabajar con figuras destacadas como Thierry Mugler, Jay-Z y Lady Gaga, incluyendo su aparición en el vídeo de Born This Way. Genest, muerto al caer de una ventana en 2018, a los 32 años, se convirtió en una figura mediática, participando en películas, anuncios publicitarios y desfiles de moda, y dejando una huella indeleble en la cultura popular.
Rick Genest, 'The Zombie Boy', en un desfile de Dsquared2 en Milán.GETTY
Durante los últimos tres días, la cuenta de Instagram de The Black Alien ha sido inaccesible. Esta ausencia repentina, junto con su reciente anuncio de dejar su proyecto de transformación, generó preocupación entre sus seguidores, quienes temían que Loffredo estuviera pasando por un momento psicológico difícil. No obstante, surgieron rumores que sugerían un cambio positivo en su vida: la posibilidad de que Loffredo estuviera dejando atrás su identidad como The Black Alien debido al inicio de una relación romántica. Estos rumores se confirmaron el martes, cuando compartió un vídeo en su canal de YouTube, acompañado de una breve pero significativa descripción: “Os quiero presentar a mi novia, con la que he empezado una nueva etapa de mi vida”. Este anuncio marca el comienzo de un capítulo feliz y el final de un importante proceso.
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