Triunfo Arciniegas
BIOGRAFÍA
Me piden una biografía para la solapa del nuevo libro, un texto para niños, y se me ocurre esta línea: ojo de vidrio, pata de palo y corazón de piedra. No es exacto, por supuesto. Tengo un lente y veo bien con ese ojo. La pierna no es de palo sino que ahora y para siempre tengo una platina desde arriba del tobillo hasta casi la rodilla y que en las radiografías parece una espada. Pura nostalgia de pirata. Soy el caballero de la espada. Pura nostalgia medieval. Y no tengo el corazón de piedra pero a veces se le requiere.
Alekos, querido y viejo amigo, con su habitual sabiduría ilustró La última lágrima. Así suelen llamarse las tiendas próximas a los cementerios. De ahí viene el título, y de la expresión "lágrimas de cocodrilo". De hecho, el protagonista es un cocodrilo que reserva una lágrima para su última hora.
Parece una broma, incluso el nombre el personaje, Felisberto. Pero no. Desde hace años me he dedicado a escribir para niños sobre las grandes preguntas, sobre los asuntos fundamentales de la vida: la muerte, la mutilación, el paso del tiempo, la identidad, la soledad. ¿Qué hacer cuando se pierde todo? (La última lágrima.) ¿Cómo vivir sin una parte de nuestro amado cuerpo? (El rabo de Paco) ¿Y la certeza de que todos vamos a morir? (El perfume del viento, El último viaje de Lupita López.) ¿Quién soy? (El niño gato.) La guerra y el exilio (El árbol triste.)
No se habla de estos asuntos en un libro para niños, por supuesto, pero las verdades fundamentales sostienen el texto, como cimientos de la casa de la fábula. Tampoco se trata de sumergirnos en los mundos oscuros o de restregar en el lector la malparidez de la vida. Digo que no se pueden excluir o tapar al estilo de los gatos los asuntos terribles y deben tratarse con delicadeza, con el lenguaje de los poetas, con absoluta franqueza.
Parece una broma, incluso el nombre el personaje, Felisberto. Pero no. Desde hace años me he dedicado a escribir para niños sobre las grandes preguntas, sobre los asuntos fundamentales de la vida: la muerte, la mutilación, el paso del tiempo, la identidad, la soledad. ¿Qué hacer cuando se pierde todo? (La última lágrima.) ¿Cómo vivir sin una parte de nuestro amado cuerpo? (El rabo de Paco) ¿Y la certeza de que todos vamos a morir? (El perfume del viento, El último viaje de Lupita López.) ¿Quién soy? (El niño gato.) La guerra y el exilio (El árbol triste.)
No se habla de estos asuntos en un libro para niños, por supuesto, pero las verdades fundamentales sostienen el texto, como cimientos de la casa de la fábula. Tampoco se trata de sumergirnos en los mundos oscuros o de restregar en el lector la malparidez de la vida. Digo que no se pueden excluir o tapar al estilo de los gatos los asuntos terribles y deben tratarse con delicadeza, con el lenguaje de los poetas, con absoluta franqueza.
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